Fame es un juego de rol que, si bien bebe directamente de clásicos del género de los 'roguelike' como 'Ancient Domains of Mystery' o 'Castle of the Winds', va mucho más allá que estos para ofrecer un juego de rol enorme en todos los aspectos.
Lo primero que tendremos que hacer antes de comenzar nuestra aventura será crear nuestro personaje. Y desde este momento ya podremos comprobar la profundidad de Fame. No solo podremos elegir el nombre, la clase, los atributos o el sexo de nuestro héroe, sino que también podremos elegir su edad y algunas características especiales como por ejemplo, que le falte un brazo o una pierna.
Durante la creación del personaje también será cuando podamos elegir si queremos tener muerte permanente o la posibilidad de resucitar a nuestro personaje. Si elegimos la primera opción experimentaremos de verdad la experiencia 'roguelike' tradicional.
El nivel de detalle al que llega Fame va tan lejos que, si durante la creación de nuestro héroe elegimos que no supiese leer, no podremos leer señales. Claro que eso es algo que tampoco podremos hacer si es de noche y no tenemos una antorcha.
A estos pequeños detalles se suma una mecánica de rol muy sólida y tradicional en la que podremos hablar con montones de personajes, recibir misiones y encargos de todos ellos, comprar y vender objetos, y por supuesto pelear con montones de criaturas.
El sistema de combate, como es habitual, se desarrolla por turnos. En nuestro turno podremos elegir atacar con el arma que tengamos equipada, utilizar uno de los objetos de nuestro inventario (como pociones), lanzar hechizos... o salir corriendo.
Fame es un juego de rol lleno de posibilidades, que cuenta una historia larga e interesante, y tiene un sistema de juego muy sólido. Pese a que su apartado gráfico no es exactamente sobresaliente, estamos ante un RPG de los que gustan a los aficionados de los RPG.
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